Inutilidad

Hacia 1880, el brasileño, que no portugués, Joaquim Maria Machado de Assis publicó la fantástica novela -según mi dislocado gusto- “Las memorias póstumas de Blas Cubas”, en la que el tal Blas, que acaba de morir, nos cuenta su vida desde el momento de su defunción hasta su nacimiento. Así, el primer capítulo se llama “Obito del autor”. Uno de mis capítulos preferidos es el 136, titulado “Inutilidad”, que contiene exactamente 12 palabras. Las siguientes:

“Pero, o mucho me engaño, o acabo de escribir un capítulo inútil”.

Ni una palabra más. He recordado el capítulo 136 de Blas Cubas esta mañana al empezar a postear y darme cuenta de que, escribiera lo que escribiera, sería un post inútil porque nadie lo leería. Es Semana Santa y os supongo cumpliendo en vuestras hermandades con vuestros disfraces de costalero (el mío lo olvidé hace ya años en la tintorería). Yo no soy muy de esas cosas semanasánticas, así que estos días seguiré tocando el piano en la casa de citas y vigilando la programación de televisión para ver qué día emiten “Ben-Hur”. Pero ni siquiera eso me ilusiona ya mucho: este año, en Vía Vegetal, la he visto ya tres o cuatro veces. Una de ellas, en pleno agosto. Fue una sensación muy rara, pero la carrera de caballos la volvió a perder el pobre Messala.